La zona núcleo, una región agrícola crucial en Argentina, se ve afectada por la sequía y espera ansiosamente las lluvias pronosticadas para mejorar las condiciones de sus cultivos. Esta precipitación podría detener o revertir el deterioro de los cultivos y reponer las reservas hídricas.
Mejoras para la zona núcleo: lluvias esperanzadoras
Las precipitaciones previstas llegarán durante el día y la primera parte del martes, proporcionando el alivio tan esperado para la zona núcleo. Estas lluvias tienen el potencial de hacer retroceder la sequía y rejuvenecer los cultivos, que han sufrido las consecuencias de la falta de humedad.
El déficit de lluvias en septiembre ha aumentado la necesidad de precipitaciones, y la recomposición hídrica no será uniforme. Una franja de la zona núcleo se beneficiará especialmente de estas precipitaciones, con la posibilidad de mejorar las condiciones del suelo y aumentar la producción de los cultivos.
Otros beneficiarios de las lluvias
Además de la zona núcleo, las precipitaciones también pueden beneficiar a otras regiones. El NEA (Noroeste Argentino) y el norte de la Mesopotamia pueden experimentar lluvias que mejoren el perfil hídrico, mientras que el NOA (Noroeste Argentino) podría recibir precipitaciones más leves.
Las lluvias previstas serán cruciales para la zona núcleo, que ha estado luchando contra la sequía. Estas precipitaciones tienen el potencial de mejorar significativamente las condiciones de los cultivos y restaurar las reservas hídricas.
Informe meteorológico nacional