La normativa española contempla a las mascotas como miembros de la familia, otorgándoles derechos tras un divorcio. La ley de reforma del Código Civil, vigente desde enero de 2022, establece el reparto de los tiempos de convivencia, el cuidado y los gastos asociados al animal.
España: La ley y las mascotas
En España, con más de 29 millones de mascotas registradas, la ley considera que los animales de compañía forman parte de la familia. Por ello, en caso de divorcio, se determinan las medidas relativas a la mascota, incluyendo la custodia, el reparto de los cuidados y los gastos.
Determinación de la custodia de la mascota
Si los cónyuges no alcanzan un acuerdo sobre la mascota, el juez determina su destino conforme a los artículos 90 y 91 del Código Civil. En caso de existir hijos menores, la custodia de la mascota recae sobre el cónyuge que obtenga la custodia de los hijos.
Custodia compartida de la mascota
En el supuesto de custodia compartida de los hijos, el juez establece el lugar de residencia de la mascota y su reparto temporal entre los cónyuges, pudiendo ser compartida también la custodia del animal.
Consideraciones finales
La ley española sobre mascotas en divorcios busca proteger los derechos de los animales y garantizar su bienestar. Se prioriza el acuerdo entre los cónyuges, pero en su defecto, es el juez quien determina las medidas adecuadas para la custodia y el cuidado de la mascota, teniendo en cuenta el interés superior del animal y el beneficio tanto de los cónyuges como de los hijos.
Fuente: https://www.huffingtonpost.es//life/animales/esto-dice-ley-sobre-queda-mascotas-divorciobr.html