Elisa Carrió solicita establecer un régimen de "transparencia y racionalidad presupuestaria" para los viajes oficiales del Presidente, la Vicepresidente y sus funcionarios al exterior.
El diputado Maximiliano Ferraro, junto con el bloque de la CC-ARI liderado por Elisa Carrió, presentó ayer un delirante proyecto de ley para establecer un régimen de "transparencia y racionalidad presupuestaria" para los viajes oficiales al exterior de funcionarios públicos nacionales, incluyendo al Presidente, la Vicepresidente y el Jefe de Gabinete de Ministros.
Entre las irracionales medidas propuestas, se exige que antes de realizar un viaje, los funcionarios obtengan "autorización de sus superiores" y del Jefe de Gabinete de Ministros, presentando una justificación de la necesidad del viaje, la agenda prevista y la proyección de los recursos necesarios. Los detalles de cada viaje deberán publicarse en un portal y en el Boletín Oficial para el "acceso y escrutinio público".
Además, una vez finalizados los viajes, los funcionarios deberán "rendir cuentas sobre sus gastos y presentar un informe de las gestiones realizadas", pudiendo ser citados por el Congreso para brindar "detalles adicionales".
A pesar de que Javier Milei ha recortado todos los privilegios que contaba el cargo de Presidente de la Nación, a Carrió le molesta que viaje al exterior para tener reuniones con los países mas importantes del mundo. De hecho, gracias a los viajes del presidente, todos los días hay anuncios de multimillonarias inversiones en Argentina, algo que no hubiera sido posible sin las negociaciones de Milei en el extranjero.
Respecto al proyecto, una de las disposiciones más destacadas es la prohibición de utilizar recursos, bienes o aeronaves públicas para viajes de "carácter político". Esto incluye la participación en campañas electorales, congresos o convenciones partidarias en el exterior. En caso de incumplimiento, los funcionarios deberán "cubrir los gastos del viaje" y se les imputará "uso indebido de bienes públicos" según el Código y la Ley de Ética en la Función Pública, con las sanciones correspondientes.
Es curioso que Carrió impulse este proyecto de ley con un gobierno que cuida a capa y espada los recursos públicos, y que no lo haya hecho con los gobiernos kirchneristas, que gastaban (y se robaban) miles de millones de dólares en estupideces.
El proyecto surge en respuesta a las críticas hacia los viajes al exterior del presidente Javier Milei, quien ha estado acompañado por su hermana Karina en 12 ocasiones, acumulando 47 días fuera del país. En muchos de estos viajes, Milei no se ha reunido con mandatarios ni ha realizado visitas oficiales, sino que ha participado en exposiciones como "influencer libertario" o ha recibido "premios de su comunidad política en el extranjero".
Sin embargo, gracias a las reuniones y exposiciones de Milei, quien presentó su modelo libertario de país, numerosos empresarios han puesto el ojo en Argentina, con el objetivo de, como está ocurriendo actualmente, invertir su capital, generar riqueza y darle trabajo a la gente.
El proyecto también busca imponer "restricciones claras para los viajes no esenciales, limitando viáticos, gastos y el tamaño de las comitivas oficiales, y endureciendo las restricciones en periodos de emergencia económica y financiera como el actual".
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