El agua de coco es un refresco natural con numerosos beneficios para la salud, entre ellos la reducción de la presión arterial y la mejora de la hidratación.
Reduce la presión arterial
El agua de coco es una buena fuente de potasio, un mineral que ayuda a reducir la presión arterial. Una taza de agua de coco contiene 400 miligramos de potasio, que puede ayudar a relajar los vasos sanguíneos y reducir la tensión arterial.
Repone electrolitos
Los electrolitos son minerales que son esenciales para la función muscular y cardíaca. El agua de coco es una buena fuente de electrolitos, como el sodio, el potasio y el magnesio, que pueden ayudar a reponer los niveles de electrolitos perdidos a través del sudor o la diarrea.
Mejora la digestión
El agua de coco contiene magnesio, un mineral que puede ayudar a mejorar la digestión. El magnesio puede ayudar a relajar los músculos del tracto digestivo, lo que puede ayudar a aliviar el estreñimiento y otros problemas digestivos.
Fortalece los huesos
El agua de coco es una buena fuente de calcio y fósforo, minerales esenciales para la salud ósea. El calcio ayuda a construir y mantener huesos fuertes, mientras que el fósforo ayuda a la absorción de calcio.
Tiene propiedades antioxidantes
El agua de coco contiene antioxidantes, que son compuestos que pueden ayudar a proteger las células del daño. Los antioxidantes pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardíacas.